Consiste en realizar la evacuación y el cepillado de las paredes del reservorio, prestando especial atención a las grietas y fisuras por ser lugares donde pululan los microorganismos. Luego se vacían los tanques hasta 20cm, a fin de disponer de agua para la etapa inicial de la limpieza.
Seguido se agrega el desinfectante a una solución de hipoclorito de sodio al 10% para una concentración final de 2 miligramos por litro. Esta solución tiene acción bactericida, fungicida y alguicida.
Si el agua de tu tanque o cisterna no tiene movimiento durante 15 días comienza a producir bacterias?; es por eso que es muy importante que sus reservorios de agua, aparte de lavarlos y desinfectarlos, funcionen correctamente y ase asegure una circulación constante del agua y que el líquido se consume a diario para la renovación constante del mismo.